El amplio tema de los vídeojuegos para niños y sus beneficios, es motivo de intenso debate. Padres, educadores y psicólogos sostienen posiciones encontradas por lo que realizar estudios serios se volvió una necesidad imperiosa para orientar mejor a las familias.
Precisamente el resultado de uno de ellos, difundido en un informe del Comité de Mercado Interior y Protección del Consumidor del Parlamento Europeo, arroja un poco de luz al respecto. En síntesis su opinión es positiva y optimista a favor del uso de los mismos.
Por supuesto: hablamos de videojuegos adecuados para cada edad y que sean capaces de fomentar valores constructivos y no destructivos. Es labor de padres y maestros, buscar y proponer aquellos que estimulen capacidades como abstracción, deducción, estrategia, cooperación y coordinación auditiva, visual y motora.
Además otro punto importante es el sano equilibrio entre esta actividad y las que suponen ejercicio físico, deportes y contacto social con chicos de su edad: como en todas las cosas de la vida lo malo es un exceso o una exclusividad. La recomendación enfática es estar atentos a los vídeojuegos que consumen nuestros hijos, comprarlos por catálogo, asesorarnos bien y en lo posible jugar de vez en cuando con ellos y ellas, para monitorear sus reacciones al respecto.